Por: Mario Castillo Rodríguez
Mucho se habla de que será enviado al exterior como cónsul general o como embajador.
Después de un proceso electoral que arrojó muy buenos dividendos políticos al Partido Revolucionario institucional, es evidente que el tablero oficial tendrá cambios en días futuros, cambios que darán una lectura interesante a la segunda mitad de la administración del gobernador Roberto Borge Angulo.
Y en este tenor se rumora en los grandes círculos del centro del País que el Senador por Quintana Roo Félix González Canto, podría ser enviado al exterior para representar a México como cónsul general o como embajador.
Obviamente tendría que solicitar licencia para separarse del cargo como Senador de la República y dejaría inconclusa su activa participación como Presidente de la Comisión de Turismo, lo cual desde luego arrojaría excelentes posturas, primero para Cora Amalia Castilla Madrid quien entraría a suplir al ex mandatario quintanarroense en la Cámara alta del Congreso de la Unión, y segundo, a Judith Rodríguez Villanueva quien por corrimiento pasaría a ser la segunda diputada plurinominal del PRI en la XIV Legislatura.
Ahora bien, esta noticia que ha sonado mucho en las últimas horas y que obedecerá a una decisión del Presidente de la República de enviar al ex gobernador a una encomienda en el servicio exterior podría tener dos lecturas.
Primero: dados los últimos sucesos respecto a la detención del ex gobernador de Tabasco Andrés Granier por desvío y mal uso de recursos públicos, con esta decisión que tiene muchas posibilidades de ser aterrizadas, estarían blindando al ex mandatario de Quintana Roo sacándolo de la escena política del país para desviar la atención de las autoridades y de los detractores de González Canto que buscan a toda costa verlo tras las rejas ante la enorme deuda que dejó al Estado.
Y segundo: estarían allanando el camino de un Roberto Borge Angulo que tendría una salida aterciopelada de la gubernatura sin la pesada sombra de su antecesor, que desde luego le daría mayor posicionamiento político del que ya obtuvo gracias a los buenos resultados obtenidos por el tricolor en la pasada contienda intermedia, donde su partido ganó las 10 presidencias municipales y 14 de las 15 diputaciones por mayoría relativa.
Lo cierto es que en este posible escenario que tendrá lugar en días futuros, la más beneficiada sería Cora Amalia Castilla Madrid, quien gracias a su servil papel de comodín estaría brincando de la congeladora estatal al Senado de la República.
Hasta esa suerte tienen ciertas figuras que son incómodas no sólo para la sociedad sino para su propio partido.